CUMPLE- CICLOS.

Como se acerca el final del ciclo nº 20, he pensado que 
Capecitabina merece

¡una celebración!

En más de un año ha demostrado que controla a los "bichitos" que andan por mi cuerpo:
unos, encerrados en las "cápsulas" de los implantes tumorales en pleura; otros en el interior de los pulmones...
Parece que también hay un comando en el hígado y otros en algunas vértebras, pero se mantienen sin variaciones. Incluso, estos últimos no está claro si son amigos o enemigos

Igualmente peligrosos los que circulan por la sangre:
esas células cancerígenas pueden instalarse en algún órgano vital y organizar un estropicio. Más bien, habría que decir entonces desorganizar o
destropiciar. (Neologismo aún no registrado por la RAE.) 

Gracias a Capecita la situación está bastante controlada y, además, no se cae el pelo y los efectos secundarios son llevaderos. (Con mi dosis, claro.)

Creo que merece una celebración.
¿No os parece?

A veces, cuando pienso en ella, la humanizo e imagino que somos 

socias en un mismo proyecto,

amigas forzosas
o

matrimonio de conveniencia.