DOS PASITOS ADELANTE, OTRO HACIA ATRÁS, pero siempre... avanzando y - si puede ser- con una sonrisa.  

Esta noche. 

                                                                                                                                                                  Ayer hizo un año del diagnóstico de metástasis. Concretamente, como sabéis algunos, de "múltiples implantes tumorales en la pleura del pulmón izquierdo y en mediastino." Unos meses después se detectó que en el derecho también hay cierta afectación.

Me lo he planteado como un día para celebrar y dar gracias.
Puede parecer sorprendente, pero os resumo los motivos:
- Este tipo de metástasis puede cursar sin síntomas alarmantes.
- De hecho yo fui al médico porque durante varios días tenía tos, algunas molestias leves...
Como el organismo se va adaptando, no sospechaba nada grave. Tenía otras ocupaciones en la cabeza.
- Gracias a que la médico de cabecera, teniendo en cuenta mis antecedentes (carcinoma año 2000), pidió que me hicieran eco y TAC de abdomen y tórax, se "descubrió el pastel".
- Pasado el susto y disgusto iniciales, y ya ingresada por urgencias, Dios me concedió una gran paz. Yo repetía interiormente: "Hágase tu Voluntad." A veces llorando, a veces más tranquila...
Esa paz no me ha abandonado casi nunca. De 365 días, puede que haya habido cinco o séis un poco baja. Por eso digo "casi".
- Desde entonces he recibido séis ciclos de químio endovenosa, tratamiento hormonal y ahora oral. (Siete ciclos... por el momento.)
- He recibido también mucha ayuda del cielo y... de la tierra, en forma de cariño, interés, apoyo, oraciones... en variadas manifestaciones, grados y estilos.

Por eso no puedo por menos que repetir:

¡GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS!