"POR FAVOR, DÉJENME LLORAR UN POQUITO." decía una conocida actriz, siempre impecable, sonriente y animada, a la que diagnosticaron cáncer.
Me sentí identificada con ella estos días en que estuve un poco de bajón. Realmente fue el lunes, que se juntaron la diarrea, el cansancio y ¡sí!... Cierto abatimiento. Yo también me autorizo a reconocerlo. No hay porqué obligarse a estar siempre impecable.
Gracias a Dios, mañana despido a CAPECITA, que será enviada al fondo del armario hasta...
nuevo aviso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario